Escuchaba la canción en casa de unos amigos a los que les gusta mucho esta banda. Y se quedó dando vueltas en la cabeza toda la noche, como el saborcito del jarabe para el asma, que te raspa la garganta por un rato.
Muy dulce, excesivamente dulce. Yo prefiero amargo y no un camelo.
Por Jarabe de Palo. Depende, 1988.
Yo también lo prefiero.
Besos.
A mí de este hombre todo me suena igual…. es como si hubiera recogido aquella melodía de «Bonito» y la repita modificada hasta la saciedad…..
Besos, princesa…
Sin embargo a mí, de este hombre , me vuelve «casi» loca «casi» todo.
«Casi» hasta le tolero el camelo.
Así me tiene…. 😉
Besos