#tbt Josefina

A Josefina me la encontré hace una semana. Al principio no estaba segura de que era ella. Hasta que empezó a cantar. Cantaba bajito, porque creo que no tenía la certeza de que ese sería su escenario a partir de ahora.
Yo sé cuando lo supo. Fue el primer flash lo que la envalentonó. Se quedó quietecita, parada sobre todas sus patas y así estuvo, aún cuando la señora esa continuó acercándosele, cámara en mano. Como una sorpresa la luz invadió sus ojos, siempre acostumbrados a menos iluminación. Y su voz subió el volumen, convirtiendo el anden de la 59th Street – Line A del NYC Subway, en una atracción para turistas y marchantes, a esa hora. Menos los domingos.
Los domingos Josefina canta para su pueblo. No para nosotros que ya, casi, no somos los que habitamos acá. Su pueblo está cada vez más cerca de desplazar todo en la ciudad.
Su pueblo es el dueño de Manhattan.